Llevo una semana un poco rara. Normálmente suelo ir felizmente por la vida, no paro de hablar o de cantar, me muevo de un lado para otro, bailo, río, no paro quieta. Ésta semana, sin embargo, es como si me hubieran quitado toda la energía de mi cuerpo, no tengo ganas de hacer nada, ni siquiera de comer o de salir a la calle, pero tampoco de quedarme en casa, estoy extrañamente apatica.
Tampoco se puede decir que este mal, porque no lo estoy, simplemente estoy rara, dedico mis horas a leer, dibujar y conectarme al msn para hablar con X. Supongo que es lo único que me hace ilusión ahora mismo, hablar con X, y no me gusta que me haga ilusión.
Y no me gusta porque no me gusta que me guste, porque siento que si hipotéticamente pudiera llegar a tener algo con X, acabaría haciéndome daño, porque tiene un instinto autodestructivo que no puede con él, porque tengo instinto protector y no puedo dejar que se haga daño, porque el cuerpo me pide que le ayude a tener más autoestima, a que se quiera más, a que aprecie cuánto vale (que vale mucho) y X no va a dejarme, porque si no lo ha hecho en un año, no lo hará en un fin de semana, porque si no me ha querido en un año, no lo hará en una noche.
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